#miSinsombrero
Hoy empezaré escribiendo sobre lo que es a día de hoy una Sinsombrero, de cómo ha evolucionado el término, y lo que son ahora ellas. Mujeres inconformistas con la vida misma, con ganas de un mundo mejor y más digno. Ellas podrían haber sido una de las Sinsombrero en su época, pero ahora no les queda mas remedio que ser chicas revolucionarias.
No se parecen casi nada entre ellas, las hay desde 16 años hasta 60, ¡pero hay algunas con 83 incluso! Rubias o morenas, altas o bajas, delgadas o mas grandes, de ojos azules o marrones, y así podría segur todo el día. Para ser una chica revolucionaria no importa el físico, tan solo es necesario tener ese implacable carácter que las define. Lo principal en ellas, es su sed de libertad, de poder volar y ser aire. Son fuertes, decididas y implacables contra el sistema, pero debajo de su coraza de hormigón armado, se esconde un corazón frágil, delicado, a la vez que tierno. Dándolo todo cuando están enamoradas, protegiendo siempre a su amado, siempre compañero en su lucha contra el sistema.
Mi chica revolucionaria, sinsombrero, compañera de viaje o como la queráis llamar, tiene 17 años. Es refrescante como un granizado en verano, dulce hasta causar diabetes, y, lo más importante, es decidida, sabe lo que quiere, se podría decir que es la voz del viento al llegar la noche, escuchada por pocos pero libre. Influenciadora, nefelibata, independiente, simplemente como una Caperucita harta de vivir siempre la misma historia, dispuesta a plantarle cara al lobo.
No es la más guapa del bar, pero sabe brillar, y eso la hace única. Nunca viste de domingo, pues reluce cual diamante recién tallado a diario. No necesita de maquillaje para hacerse notar, ni de fotos provocativas para cazar a un hombre. Le basta con su labia, su extenso conocimiento de los más extraños vocablos de la lengua española, te embelesan hasta tal punto que caes rendido ante sus manos. Te quita la hipofrenia de dos hostias y se asegura de que no vuelvas a caer en su telaraña. Es única a su manera y eso la hace especial. Conocida, compañera, amiga, pareja, ¿qué mas da? Es mi chica revolucionaria. Ella es mi sinsombrero.