La científica Celestina​

Me refiero, concretamente al laboratorio de Celestina, donde esta realiza el conjuro. Hay mucho publicado sobre esto y el actor debe leerlo para no caer en el tópico. No se trata realmente de la covacha de una mendiga, sino de un verdadero laboratorio como puiera ser el de Tomás de Aquino o Alberto Magno, en los que existía todo el instrumental de un médico, de un científico, en definitiva, de una época precientífica. Hay que recordar que cuando Pármeno describe el laboratorio de Celestina en el acto I, dice que tenía una habitación "llena de alambiques, de redomillas, de barrilejos de barro, de vidrio, de arambre, de estaño, hechos de mil faziones. Hazía solimán, afeyte cozido, argentadas, bujelladas, cerillas, llanillas, unturillas, lustres...". La descripción es larguísima y pormenorizada. Todo eso destruye la idea que tenemos hoy de una tópica bruja que juega con hierbecitas y con visiones. [...] Cuando se la define, se dice de ella que es maestra en seis oficios, y entre ellos está el de hacer perfumes que es actividad química de la época, o el curar niños. Esa disposición científica también puede verse en la sutilidad e inteligencia con que trata a Melibea en el acto IV, tal como hoy lo haría un psiquíatra. Solo que Celestina no necesita un diván.

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ÁNGEL FACIO: "Visión y comentario de La Celestina", en 23 monólogos para ejercicios. La Avispa.